domingo, 12 de marzo de 2017

Recordando a Anabel

-Tú no vienes a presentar un libro, vienes a contar tu experiencia, y disfrutas tanto mientras transmites el mensaje, que nos haces disfrutar al resto-, eso fue lo que me dijeron anoche mientras cenaba con mi familia lorquina, la familia de Anabel. 


Y hoy, cuando iba camino de Murcia para emprender el viaje de vuelta, fue inevitable contener el llanto, y como yo no evito nada, dejé que por mi cara corrieran lágrimas de alegría por haber tenido la inmensa fortuna de haberla conocido. Solo me han hecho falta dos días para darme cuenta del inmenso legado que ha dejado y por eso le estoy profundamente agradecido. Y me llevo, a Lanzarote me llevo casi tanto como traje y derramé en los corazones de la gente que me quiso escuchar. Me llevo sus pañuelos, me llevo su regalo, me llevo su recuerdo. Gracias Anabel por haberme acompañado...

1 comentario:

  1. Ellos , y todos los que compartimos contigo, somos quienes te damos las gracias te damos las gracias , por enriquecernos con todo cuanto transmites ¡¡¡ Serenidad , Paz y mucha ..... mucha Alegría !!!

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