Llevo días
pensando qué significado podría tener el número del dorsal. Lo de poner el
nombre de VIDA fue algo que hizo Elena, mi más que entrenadora personal, porque
intuía que me iba a encantar. Y así fue. Ella hizo la inscripción y me dio la
gran sorpresa. Pero la cifra te la asignan de forma aleatoria, ¿por qué el número 31? Y hoy llegó la respuesta y no pude sino
emocionarme. Con 31 años empezó todo, fue
con 31 años cuando comenzó la historia y empecé a abrazar la vida…
Tal y como
reza el final del libro: «Sí, siempre
recordará el momento exacto en que abrazó la vida. Juntos, de la mano,
caminando…». Y ese dorsal ya adorna mi puerta de salida…
No hay comentarios:
Publicar un comentario