Recién estoy aterrizando y ya estoy pegado a mi blog para contarles que he vuelto de Estambul y que ahora estoy entusiasmado con la llegada de los Reyes Magos. De Estambul, esa maravillosa ciudad, ya les contaré en los próximos días, pero ya que mañana es el día de los Reyes Magos no quiero dejar pasar la oportunidad de compartir con ustedes esta celebración especial...
Los Reyes Magos...¿realmente existen?...
Justo acabo de leer la carta que le había escrito la última vez, el año pasado, cuando por estas fechas a mí me seguían dando ese maravilloso tratamiento de belleza. Pedí disfrutar de un día de playa...y el deseo fue concedido, porque pude disfrutar no sólo de un día, sino de muchos, durante todo el verano. Pedí también jugar al pádel con la derecha, y ese deseo sí que no fue concedido, pero estoy tan acostumbrado a jugar con la mano izquierda, que me he adaptado y he aceptado tal circunstancia. Pedí también estar rodeado de toda esa gente que me animaba a seguir mi camino y a conseguir mi meta, y hoy estoy rodeado de la gente de la que debo estar rodeado, recibiendo cariño y entregando cariño a partes iguales. Pedí salud...y recuperé la salud, y me prometí que si eso pasaba, desde ese día iba a creer en la magia de los Reyes Magos...
Existan o no los Reyes Magos, creo que no hay que dejar de soñar y fantasear sobre lo que queremos y deseamos. Nuestros deseos nos lo podrán conceder los Reyes Magos o se harán realidad con nuestro esfuerzo y tesón a la hora de lograrlos, pero lo más importante es tener metas que querer alcanzar...
Y este año, a los Reyes Magos les pido salud, mucha salud, para seguir aprendiendo a conocerme y desapegarme de todo aquello que no soy...
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