Pues me salió, en los mensajes de las bolsitas de té de una conocida marca, el siguiente mensaje: "Si no reaccionas, estás en buena forma". ¡Qué maravilla! No solo entrenar los músculos sino también la mente, que pasemos de ser reactivos a más reflexivos...
A veces entramos en conflicto por cosas que no tienen mayor trascendencia, pero querer tener la razón nos nubla la cabeza... Ante esto, recordé una pregunta: ¿Y dónde estarás dentro de 300 años? Dentro de 300 años no existirá nada, ni tú, ni él, ni la situación que está robándote la paz... ¿Merece entonces la pena darle tantas vueltas a la cabeza? A mí, por lo menos, la pregunta me ayuda a relativizar cualquier conflicto que se cruce en mi camino...
Y me encantó que me dijeran maestro y alumno, maestro porque enseño y alumno porque tengo la voluntad de seguir aprendiendo... La ignorancia más absoluta es creer que ya lo sabes todo...
El arte de aceptar lo que está sucediendo en nuestras vidas y en lugar de agriarnos, tener la voluntad de aprender de ello... Si son limones lo que nos está ofreciendo la vida, pues hagamos limonada...
Y qué maravillosa sensación cuando empiezas a ver la luz tras transitar por un túnel oscuro y dificultoso, quizás demasiado tiempo, pero fuimos capaces de salir adelante, así que celebrémoslo...
Y si aún nos has llegado al final del túnel no pierdas la esperanza, sigue adelante, confía, la luz estará ahí esperándonos...
Suelo felicitar los cumpleaños con un feliz vida y yo no podía ser menos... ¡Feliz vida! ¿Mi regalo? Seguir viviendo...
Volver al pasado jamás, a menos que sea para sanar... En mi caso, para recordar lo que viví. Respiro y doy gracias por todo lo que viví...
