Cuando crees que no puedes abordar una situación, aparece el miedo
paralizante… Lo ves de frente, lo palpas, lo hueles, sientes que se agita tu
respiración y te preguntas si es un miedo natural que te intenta proteger o
puro artificio de la mente. Y cuando llegas a la conclusión de que el miedo es
imaginario, miro hacia dentro para hacer un inventario de los recursos que
necesito para afrontar lo que está sucediendo… La vida a veces te pone delante
del abismo, experiencias para que decidas huir y correr hacia atrás o respirar
hondo y avanzar… Y decidí hacerlo, no iba a morir en el intento, así que
por qué no intentarlo. Lo hice y aprendí, una nueva oportunidad para evolucionar…
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