Soy afortunado

Tiemblo, vibro, me emociono, unas veces por miedo y otras porque siento que escucho a mi corazón y me cuenta al oído que todo está bien, todo está bien. Entonces voy a la cama con ganas de soñar, de imaginar un futuro. Calma, todo está bien, pero ten calma, me vuelve a susurrar el corazón, ten calma porque todo llegará, lo importante es vivir el ahora y no adelantarte a los acontecimientos. Ahora, esa palabra me recuerda el libro que estoy leyendo ahora, el poder del ahora...

Y después de leer un rato duermo y sueño, y al despertarme sigo soñando, como si todo fuera un sueño, un sueño en el que puedo decidir lo que quiero y por eso lo proyecto. Quiero vivir, quiero vivir, quiero vivir, quiero vivir, quiero vivir, vivir, vivir la vida. ¡Qué afortunado soy de seguir estando con vida! Aún muriendo mañana, no puedo dejar de dar las gracias por esta vida que me contagia, no quiero dejar de soñar porque los sueños se hacen realidad...