lunes, 24 de septiembre de 2018

¿VIDA infinita?


Y con el dorsal “8 VIDA” hice una nueva carrera en la que acabé más rápido que nunca, 10 kilómetros por debajo de los 44 minutos. Superé mis límites, una vez más, lo que me hizo reflexionar sobre mis propios límites. ¿Puedo mejorar más? ¿Estaré esforzándome más de la cuenta? Esa última pregunta salió de una voz que trata de pararme y contagiarme de miedos…  Yo corro y punto, me dejo sentir, me trato de superar, me dejo llevar, además nunca llevo reloj y no me entero del tiempo hasta que cruzo la línea de meta. Corro para disfrutar y eso es lo que me gustaría seguir haciendo. Y el número 8 junto con el nombre VIDA bien podría tratarse de vida infinita. Eso es lo que gustaría, vida infinita para seguir experimentando y aprendiendo…



jueves, 20 de septiembre de 2018

Guerrera pacífica


Hoy me siento así, más en paz si cabe, como si hubiera recibido la mejor noticia confirmando lo que ya intuía, las piezas encajan y seguimos llenos de vida. Luchadora, peleona, guerrera, esos adjetivos son asociados a su persona, tal vez nunca dejen de calificarla de esa manera porque así nos lo han enseñado desde muy pequeños, que hay que luchar, que contra la enfermedad debemos batallar con uñas y dientes… Entonces no me peleo, hace tiempo que no voy en contra de nada, le doy la vuelta y maquillo la etiqueta, la transformo a mi gusto, es una guerrera, pero una guerrera pacífica, centrada en ella misma, en acallar sus temores, apagar sus limitaciones y descubrir todo su potencial, una mejor versión de sí misma. Creer y crear una relación de dos con su amigo imaginario, un diálogo íntimo que no todo el mundo es capaz de comprender pero que ella escucha con atención para seguir aprendiendo y evolucionando… Gracias, gracias por darle sentido a todo esto…



miércoles, 19 de septiembre de 2018

La sonrisa cómplice del globo


Y con la sonrisa cómplice del globo ascendí al cielo… Me iba alejando de la tierra, la sensación de que ya no pertenecía a ella, que con la mano podía coger los vehículos y moverlos de lado, decidir lo que hacer con ellos, trasladarlos a otro lugar, girarlos y que cambiaran de dirección… Tal vez Dios juega así, moviendo los hilos desde las alturas de todos los que habitamos el planeta, lo imagino acomodado sobre las nubes dirigiendo la película de nuestras vidas, creando las tramas perfectas, provocando que algunos nos crucemos en el camino y surja la sinergia perfecta… Llámalo destino, llámalo casualidad, llámalo obra universal, da igual. ¿Te has dado cuenta de que si estás leyendo esto es que aún estás vivo? Eso sí que no da igual, agradece y sigue disfrutando…



martes, 18 de septiembre de 2018

La liga de las estrellas, primera división


Y cuando a veces dicen “creo que estamos en ligas diferentes”, en lugar de pensar en la liga en la que juegan otras personas, me da por imaginar la liga en la que juego o aspiro a jugar yo, la liga de las estrellas, primera división, aquella en la que tienes los ojos bien abiertos porque continuamente aparecen sorpresas en forma de cosas o de personas que no quiero dejar escapar, una liga en la que tenga la certeza de que todo lo que suceda será lo mejor para mi evolución, en la que no quiero pensar que las personas me van a hacer daño sino imaginar las cosas bonitas que voy a vivir junto a ellas, tener plena confianza en mí y en los que me rodean, sentir que les importo y aporto al igual que sentir que esas personas también me importan y aportan, si no, adiós y gracias por participar. En esa liga quiero lanzarme al vacío, tantas veces como haga falta, sin controlar nada y sin esperar nada, un sí rotundo a vivir y dar lo mejor de mí, experimentar que lo tengo todo y no necesito nada y esforzarme por conseguir mis propósitos y metas, tirarme al suelo y que se retuerza mi cuerpo de la risa, gritar, llorar, que cada emoción que erice mi piel salga por donde sea y se libere en el exterior, abrazar, mirar a los ojos y hablar con las miradas sin necesidad de palabras, besar, que surja la química y se encienda la chispa que dé sabor a la vida… ¿Hay más jugadores en ella? Deseando encontrarlos…



jueves, 13 de septiembre de 2018

Cada vez que te levantas...


Quedarte donde estás, acostado en un sofá, abrazado a tu soledad, sin ganas de hacer nada, con ganas de llorar… A veces pasa… Y después todo lo contrario, ánimo para continuar, trepar árboles, escalar el Everest… Ciclos que se van sucediendo, subidas y bajadas necesarias para equilibrar, permitir los diferentes estados, porque ninguno es mejor ni peor que el otro. No se trata de quedarte anclado en las profundidades por tiempo ilimitado, de regodearte en tu desgracia ni sentirte una víctima de tus circunstancias, sino regalarte tiempo para reflexionar y que el impulso sea más alto. Y una certeza me rodea, cada vez que te levantas de una recaída, más fuerte serás…



martes, 11 de septiembre de 2018

Cuando tiras una piedra en el estanque


Como cuando tiras una piedra en el estanque, que empieza a generarse una especie de tsunami y las ondas expansivas llegan hasta la orilla; un golpe certero y tus cimientos se tambalean… A veces tomar decisiones produce eso, revoltura, el fondo se veía con nitidez pero una decisión provoca que el agua se enturbie y te cueste ver. Pero si sientes paz, si debajo del lodazal sientes paz, has tomado la decisión correcta, tienes derecho a ser libre y expresar tu sentir, dejando atrás los sentimientos de culpabilidad y pensar más en los otros que en tu propio bienestar. Paciencia, las aguas se calmarán y volverás a ver el fondo con absoluta claridad…



lunes, 10 de septiembre de 2018

Que nadie te diga que no puedes hacerlo


Al principio… al principio un pensamiento merodea por mi mente y es  quién me mandaría a mí apuntarme en la carrera, pero después, cuando llego a la meta, quiero hacer otra… Mezcla de superación, tramos que se hacen duros y requieren esfuerzo por lo empinado de las cimas, liberación, es el deporte que me está ayudando a liberar ese exceso de energía, como un niño pequeño que tiene ganas de correr y que después va directo a la cama rendido de tanto jugar, y entretenimiento, pasar un rato agradable con gente que está en tu misma sintonía, diversión… Conseguir lo que quieres requiere esfuerzo, que nadie te diga que no puedes hacerlo…



viernes, 7 de septiembre de 2018

Quiero vivir esto contigo


Y el avión se empezó a mover esquivando las tormentas que adornaban la mañana de ayer, tímidamente al principio y después con más intensidad, suficiente para que las voces de la cabecita se asustaran y se pusieran a elucubrar con un desenlace fatal… Hasta que bajé al corazón y me repetí «quiero vivir esto contigo», abandonar la mente y meterme de lleno en el corazón, ese espacio donde reside mi niño interior, aquel que le encantaba subir a un avión y que disfrutaba con las subidas y bajadas porque le producían cosquillas en la barriga y se partía de la risa. Los pensamientos y turbulencias desaparecieron al conectarme con mi esencia, ese niño con el que quiero seguir viviendo todo lo que venga…



martes, 4 de septiembre de 2018

Y una mariposa volando...


El dolor inevitable que no debemos enquistar, hay que sacarlo, arrancarlo, a gritos desgarrados, para que no queme, para que no ahogue, para que se diluya y se transforme en una mariposa volando… Y la vida, la muerte, capaces de convivir en un mismo tiempo y espacio, tan distantes y tan cercanos… ¿Y si la mariposa fuera ella volando, celebrando que la muerte es una ilusión y que la vida continúa después de cruzar la línea desconocida? Me encantaría…



lunes, 3 de septiembre de 2018

¡Qué casualidad!


Muchas veces me sale decir esa expresión, ¡qué casualidad!, aunque ahora sé que todo está orquestado, que tal y como decía Albert Einstein «casualidad es la manera que tiene Dios de mantenerse en el anonimato». Y al decir ¡qué casualidad!, normalmente va acompañado de una gran sonrisa o la boca abierta de par en par, éxtasis de sorpresa, porque jamás imaginé vivir algo igual. Y me encantan esas casualidades que se cruzan de vez en cuando por el camino que voy transitando, que me llenan de entusiasmo y ganas de querer seguir viviendo esta vida loca que estoy creando…