¡Qué me encantan a
mí esos corazones rojos del whatsapp que al ponerlos parece que
tienen vida! Desde anoche un grupo de whatsapp está inundado de
corazones deseosos de latir para recordarle a Julen que no está
solo, que no nos despegamos de él porque nos sentimos parte de él...
No
tengo ni idea de lo que es el twitter ni el hastag, aunque sí que
había visto algunos ejemplos porque últimamente están de moda.
Ayer me dio por poner el hastag #todosconjulen
y la cadena de corazones empezó a fluir. A estas horas, ni sé los
corazones que están latiendo con fuerza. Tal vez sea uno solo, el de
todos nosotros...
El
mayor antídoto para el miedo es caminar hacia el miedo.
Eso es lo que le recordé a Julen ayer. Y ayer, al ponerme en
contacto con él, me recordó un proverbio que tenía escrito en su
perfil:
Un
viejo indio estaba hablando con su nieto y le decía: “Me siento
como si tuviera dos lobos peleando en mi corazón. Uno de los dos es
un lobo enojado, violento y vengador. El otro está lleno de amor y
compasión”.
El
nieto preguntó: “Abuelo, dime cuál de los dos ganará la pelea en
tu corazón”.
El
abuelo contestó: Aquel que yo alimente”.
Pues eso, a
alimentar el lobo del amor y la compasión. Gracias, Julen, aquí te esperamos...
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