Y después de casi 24 horas sin dormir llegué a Puebla y fui recibido por unos grandes anfitriones como son Blanca y su marido Roberto...
Si contara todo lo que acontece en un día este escrito sería interminable, así que voy a destacar lo relevante, como que fuimos a Cholula y allí me propusieron si quería hacerme una limpia, lo que viene a ser purificar el alma. Pues claro que lo hice, ¿cómo voy a perderme yo esa nueva experiencia? El sahumador era conocido en la época prehispánica como tlémaitl, "manos de fuego", y en un plano metafórico era el portador del fuego sagrado con el que limpiar las malas vibras...
Y después de subir la gran pirámide para divisar el volcán Popocatépetl desde las alturas, en San Pedro Cholula probé las famosas cemitas, que bien podrían describirse como "las hamburguesas mexicanas" acompañadas de un agua de jamaica que estaba la mar de deliciosa, un jugo que se extrae de una flor y es una de las bebidas de mayor consumo en el país azteca. Me atreví con el picante y creí haber superado la prueba, pero después me advirtieron que lo que probé era solo para principiantes, pues la comida puede ser aun más picante, así que veremos pues...
Dispuesto a seguir encontrando momentos... No tengo que hacer, sino simplemente ser...
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