sábado, 29 de agosto de 2020

Dispuesto a todo con tal de sanar

Hoy se cumplen ocho años de aquel día que miré al cielo pidiendo ayuda y prometí que estaba dispuesto a todo con tal de sanar...



¿Cuál fue la clave? Muchas veces me lo pregunto. Tal vez la valentía, esa hizo que pudiera transformar mi vida. Infinitas gracias y que sigan sucediendo los milagros...

jueves, 27 de agosto de 2020

¿Afirmacionistas?

 Negacionistas, dícese de las personas que están negando la realidad de lo que está pasando y se comportan de una forma inconsciente, irresponsable e irrespetuosa contra el resto de la sociedad. ¿Y cómo llamaríamos a las personas que se creen a pies juntillas todo lo que están informando en las noticias? ¿Afirmacionistas? Negacionismo, afirmacionismo, todos los términos que acaban en ismo crean un abismo. Se están formando dos bandos enfrentados, creciendo un odio desmedido para aniquilar al que consideramos rival. ¿Y dónde quedamos el resto, los que nos permitimos dudar de lo que está pasando?  Tanta información contradictoria me hace poner en tela de juicio esta aparente realidad… Si algo me enseñaron es a no juzgar sin confirmar las infinitas posibilidades, a no creer nada que no experimentara por mí mismo, a acogerme al beneficio de la duda y a hacer valer mis derechos sin echar por tierra los derechos de los demás…




miércoles, 26 de agosto de 2020

Un toque de neutralidad

Cuando damos excesiva importancia a algo la vida nos lo puede quitar, así es la ley del equilibrio. Si nos obsesionamos con algo, puede que lo estemos alejando y desaparezca de nuestro lado. Lo mejor, un toque de neutralidad. Si lo conseguimos bien, si no lo conseguimos también… Pase lo que pase, suceda lo que suceda, es perfecto tal y como es…






lunes, 24 de agosto de 2020

Tú no tienes que ser de aquí

Famara siempre me regala aprendizajes… Después de una larga caminata de punta a punta, me dio por tumbarme al sol en una de las piedras cercanas al pueblo...


Decidí ponerme en la zona marcada con el círculo rojo, estaba vacía, aunque sí es verdad que justo al lado, en el círculo que he coloreado de verde, había unas cholas y una camiseta enrollada. Cuando estaba tumbado, una pareja que estaba a bastante distancia jugando con su pequeño, en el círculo que he pintado de azul, empieza a mirarme y de repente el hombre se levanta, viene hacia mí y me empieza a hablar con tono agresivo:

―¿En qué mundo vives? ¿Tú no sabes que hay una pandemia? ¿Qué haces tumbándote al lado de mis cosas? Levántate y búscate otro lado que si no llamo a la policía, que están como locos poniendo multas. ―La sorpresa fue total, jamás pensé que esas chanclas y camiseta fueran suyas, además de que ellos estaban con sus otras cosas a un montón de metros de distancia. Me levanté, le pedí disculpas juntando mis manos en señal de paz y me retiré un par de metros hacia la arena. Mientras, conectaba con la respiración para rebajar ese momento de tensión. Le hubiera podido decir tantas cosas… como que él también estaba incumpliendo normas por el hecho de estar jugando en la playa y caminando sin mascarilla, pero me acordé de lo que siempre me salva: ¿quieres tener razón o salud? Salud, esa siempre es mi prioridad, además de que intuía que con esa persona no se podría razonar… También me puse en su piel y lo intenté comprender: está actuando así por el miedo, el miedo incita a huir o atacar, él decidió atacar pues consideraba que mi acto ponía en peligro su integridad física y la de su familia…

Unos quince o veinte minutos después, veo que se acerca nuevamente a mí y sorprendiéndome una vez más me dice: ―Que te quede claro, eres una basura, tú no tienes que ser de aquí, la gente de aquí no hace eso, ni canario tampoco, tú tienes que ser de fuera y vienen a esta isla a llenar de mierda todo… En resumidas cuentas, me dijo de todo menos bonito. Mi reacción fue tumbarme y no contestarle, ignorar sus palabras, con lo cual más se encendió, pero no quise articular palabras porque iban a caer en saco roto. Además, seguía con la pregunta que tengo integrada más de lo que pensaba, hasta en los poros de mi piel: ¿razón o salud? Salud, siempre salud. El límite sería la agresión física, eso no lo iba a permitir, insultos me da igual, los que quisiera, para eso me llevé a la práctica no tomármelos personalmente. Después de unos minutos abrí los ojos y ya no estaba, habían desaparecido, el entorno pacífico de Famara volvió a brillar.

Yendo un paso más allá, si todo es reflejo de lo que yo tengo en mi mente, cuál podría ser aquí la enseñanza, me pregunté. Honestamente, yo también hago juicios, aunque no de forma agresiva, a la gente que está vibrando en el miedo extremo. Eso es algo que debo modificar, verlos aún más con los ojos del amor y la compasión. Gracias Famara, una vez más, por aportarme información valiosa para evolucionar y vivir en paz…

jueves, 20 de agosto de 2020

Espíritu olímpico

Desde pequeño me encantaban los juegos olímpicos: ver el desfile de los deportistas, el encendido del pebetero, vibrar con las competiciones y festejar las medallas españolas. Las anotaba todas en una libreta y cada día hacía un recuento de ellas, ¡qué coraje me daban los cuartos puestos!, ¡qué alegría las medallas de oro aunque escaseaban! ¿Quién me iba a decir a mí, por aquel entonces, que me convertiría en un corredor, aunque sea de los de andar por casa?



Este año no pudo ser, me quedé sin verlos, pero ayer tuve la ocasión de revivir la emoción de la competición durante siete minutos y medio. ¿Cómo? Siguiendo los pasos de mi entrenador, tratando de aguantar su ritmo sin desfallecer en el intento, orgulloso de que me acompañara durante un tramo de dos kilómetros y tirara de mí cual liebre desenfrenada, motivándome con cada una de nuestras zancadas y visualizando un próximo objetivo, la maratón de asfalto, ¿por qué no? Gracias por ser mi inspiración, jamás me imaginé entrenando con un atleta como tú, y por transmitir con tu mirada ese espíritu olímpico: humildad, disfrute y superación… 

miércoles, 19 de agosto de 2020

La pegatina del ego

El apego, la pegatina del ego… De cada viaje siempre traigo una frase para el recuerdo… Mientras me lo permitan, seguiré viajando para alimentarme…



martes, 18 de agosto de 2020

Manifestarse de forma pacífica

¿Dónde quedó la asertividad, hacer valer tus derechos pero respetar también los derechos de los demás? ¿Es sana esta forma de manifestarse, increpando a los que están en el extremo opuesto? ¿Dónde quedamos el resto, que simplemente queremos vivir en paz? En situaciones como estas, siempre me acuerdo de la Madre Teresa de Calcuta cuando decía que nunca la llamaran para manifestarse en contra de la guerra, pero sí para manifestarse a favor de la paz… Sigamos confiando en el respeto y la unidad…



lunes, 17 de agosto de 2020

Un terrorista

En estos tiempos que corren, ver a alguien arrastrando su maleta de viaje y que no lleve su mascarilla, ya es considerado como un terrorista. Tal vez no le había dado tiempo a ponérsela o justo se la había quitado para beber un poco de agua, pero el pánico se apodera de nosotros, lo interpretamos a nuestra manera y saltan todas las alarmas. Un turista, una persona non grata, poco menos que un terrorista, aunque lleve puesta su mascarilla... 


 

La mente también puede actuar como un terrorista, arrebatándonos nuestra paz interior. Eso sí que me resuena más… Vivamos con tranquilidad, gestiona tus miedos y confía en la vida, al final pasará lo que tenga que pasar, pero sigue viviendo…

viernes, 14 de agosto de 2020

Que sea la prudencia...

Me llama poderosamente la atención que los vídeos que hablan sobre la pandemia y ofrecen una visión distinta a la que mayoritariamente muestran en televisión, enseguida son bloqueados y eliminados de las plataformas para que no puedan ser compartidos entre los ciudadanos que también se abren a escuchar otras alternativas y contemplar la situación desde un abanico más amplio… Sin entrar en debates ni juicios infundados, cada cual que saque sus propias conclusiones, hoy me define este consejo: que sea la prudencia y no el miedo la que acompañe tu toma de decisiones...



jueves, 13 de agosto de 2020

Un virus amoroso

Tardé unos seis meses aproximadamente en escribir la novela, pero la gente se la está devorando en un abrir y cerrar de ojos, incluso los hay que la dosifican porque a pesar de estar enganchados a la historia, quieren seguir acompañados de sus personajes el mayor tiempo posible… A mí, como creador, se me hincha el corazón de gratitud al recibir estos mensajes y lanzo una intención: que Y de repente… YO se siga expandiendo como un virus amoroso para llenar de vida a tanta gente…

 

Hoy me despido con una frase de Séneca: «Parte de la curación está en la voluntad de sanar».

martes, 11 de agosto de 2020

Isla de Serendipia

¿Te basaste en esta idea para escribir la novela? Eso es lo que me preguntaron y la respuesta fue negativa porque no tenía ni idea. Resulta que antiguamente Sri Lanka fue llamada, entre otros nombres, isla de Serendipia. Si atendemos a la definición de Serendipia, se trata de «un hallazgo afortunado e inesperado que se produce cuando se está buscando otra cosa distinta». En cierto modo, eso es lo que le pasará a la protagonista de Y de repente… YO… Pero de verdad que esa información la desconocía, así que cada día me sorprendo más con las sincronicidad de la novela que está invitando al lector a viajar…



Y por aquí dejo el enlace de la última entrevista radiofónica sobre la presentación de Y de repente... YO:

Entrevista Presentación Y de repente... YO


lunes, 10 de agosto de 2020

jueves, 6 de agosto de 2020

Ese faro que nos guía

Al empezar el taller nos subimos en un barco, no sabíamos hacia dónde íbamos, pero al acabar éramos personas totalmente distintas, una mejor versión de nosotras mismas… Y después de que me hayan escrito esto, poco más puedo decir sino lanzar la intención de repetir nuevamente el taller después de un merecido descanso:

“Gracias Ibán por seguir siendo luz y ser ese barco donde subes a un grupo de personas sin saber a dónde vamos, dispuestas a vivir una experiencia desconocida. Gracias por ser ese faro para guiarnos y saber llegar a puerto si nos desviamos”.


miércoles, 5 de agosto de 2020

A la mierda con tu alegría

Ese hubiera sido el título si alguna vez hubiera escrito un libro: a la mierda con tu alegría, me confesó un día entre risas. Mi Ibán, me decía con adoración, y cuando yo no estaba presente les confesaba a sus amigos que yo tenía razón en todo lo que le aconsejaba, pero que luego no lo aplicaba o tal vez le costaba. Mi niña linda, gracias por elegirme como acompañante en tu proceso, le das sentido a todo lo que estoy haciendo y vibro con tu agradecimiento. Siempre estarás presente en mi corazón y, por supuesto, tu asiento no podía quedar vacío el día de la presentación. Un abrazo al corazón, querida Johanna...


martes, 4 de agosto de 2020

Siempre presente...

Y como no podía ser de otra manera, allí estaba ella, siempre presente, observándome orgullosa, feliz de que el sueño de la novela sea ya una realidad… Ángela, infinitas gracias por seguir acompañándome cada día, cuando hay verdadero amor las historias no acaban y punto, sino que pueden continuar de otra manera, quizás de una forma más simple, pero siempre eterna…




lunes, 3 de agosto de 2020

Y de repente... LA PRESENTACIÓN

Y de repente… LA PRESENTACIÓN. Alicia ya descansa en muchos hogares y la gente ha empezado a engancharse… Sorprendente, emocionante, hilarante, esas son las primeras impresiones. Gracias, infinitas gracias por hacer de la presentación un día inolvidable…