Hoy, después de
muchos días de vacaciones, vuelvo a la rutina...
No sé si les ha
pasado a ustedes también, pero cuando estás de vacaciones te
despiertas muchísimas veces antes de tiempo, como si no tuvieras
ganas de dormir, pero cuando realmente te tienes que despertar
temprano, es un despertador el que te ayuda a levantarte porque si no
te hubieras quedado horas y horas durmiendo...
Tenía ganas de
empezar, pero cuando llegué esta mañana me costó arrancar. Tenía
apuntado todo lo que tenía pendiente por hacer y las cosas nuevas
que había que empezar, pero hasta hace un ratito ni lo había
consultado, pues me había tomado un tiempo de reflexión, porque
aunque el año nuevo empezó hace siete días, hoy es como si
empezara un nuevo año nuevo, valga la redundancia, un año nuevo
laboral. Pero realmente no hay que ir tan lejos y separar la vida por
años, sino por días, pues cada día comienza un nuevo capítulo de
tu vida, incluso cada hora, o cada minuto...
El libro de tu
vida lo estás escribiendo desde que naciste. Cada año, cada
mes, cada día o incluso cada hora, simplemente son capítulos de ese
gran libro que es tu vida. No sabemos cuántas páginas tendrá al
finalizar, pero lo ideal sería que al final quedes satisfecho con el
contenido. Por eso sólo debes tener ganas de vivir y disfrutar de
ella al máximo, pues la vida te aportará experiencias que quedarán
grabadas, por siempre, en ese gran libro que es tu vida...
Así que habrá que seguir escribiendo...con alegría...
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