Me comí las uvas deseando SALUD

Nunca había estado tan concentrado al comerme las uvas en Fin de Año como en esta última ocasión; incluso no sabía que se comían doce porque cada una representa un mes del año vivido, así que con cada uva que me metía en la boca intenté visualizar lo vivido en cada uno de los meses, desde Enero a Diciembre, pasando por Agosto, el mes que pasé en el hospital y del que no guardo un grato recuerdo, pero llegando a Diciembre, al momento en el que me siento...verdaderamente mejor.

Hasta ahora, lo de las uvas es algo que hacía de forma mecánica, una tradición que, desde que tengo uso de razón, veía y aceptaba, sin preguntarme el porqué ni la razón de tal costumbre pero, en esta ocasión, quise dedicarle la atención que se merece así que, mientras a mi alrededor estaba la gente gritando, bebiendo y tirando voladores y petardos, por un momento me introduje en mi burbuja particular, concentrado en un único pensamiento que invadía mi mente, que es la SALUD que deseo para mí y para todos a lo largo de este año 2013; con cada "tosca" que masticaba, porque compramos unas uvas enormes en el mercado de la ciudad, intentaba proyectar ese deseo....y al finalizar la cuenta atrás, aunque en Düsseldorf no es como en España, volvimos a la realidad y acabamos gritando como los de nuestro alrededor y disfrutando del espectáculo pirotécnico.

Les tengo que contar mi estupendo viaje a Düsseldorf y Colonia...y tengo que escribir mi particular carta a los Reyes Magos, pero eso será en otra ocasión. Quiero agradecer también el comentario de Karohe; la verdad es que no sé quién eres, pero comentarios como el tuyo me ayudan a seguir adelante, así que muchísimas gracias de todo corazón. ¡Feliz Año 2013 a todo el mundo!