¿Qué?, ¿cómo?, ¿qué? Así me quedé... ¿No será una broma? No, no se trataba de una broma… ¿Empezando
el año y ya con estos giros inesperados? ¡Boom! Una bomba bajo mis pies y salto
por los aires, el corazón encogío, hasta que vuelvo a poner los pies en el
suelo y camino, respiro, siento y confío, confío en lo que siempre digo, que
todo pasa por algo y que siempre será para mi máximo beneficio…
¿Año bisiesto, año funesto? Eso
fue lo que me dijeron unas horas antes del suceso, pero no, esa es una creencia
que hay que desactivar… Año bisiesto,
año intenso, eso me mola más y el mío, desde luego, lo está siendo… Ahora,
a por ello, a vivirlo con intensidad pero desde la serenidad…